La teoría del caos, una realidad vigente
El 11 de Marzo del 2018, comienza
una nueva era en la administración de nuestro país al asumir un segundo mandato
el presidente Piñera, esto luego de un aplastante triunfo en segunda vuelta
sobre Alejandro Guillier, transformado a este último en el peor candidato de la
ex concertación o nueva mayoría desde que se creó este conglomerado a fines de
los 80’.
Desde
ese triunfo se comenzó a crear una expectativa en torno al futuro de nuestro país
como una nación pujante, con crecimiento sostenido y con un mensaje claro del
nuevo presidente, debemos trabajar unidos para estar al servicios de todos los
chilenos, invitando a la hoy oposición a unirse a este propósito. De ese
objetivo se realizaron una serie de reuniones con los ministros salientes, líderes
de oposición, que generaban gran expectativa para lo que venía.
Bueno
Chile no esta tan lejos de dicha realidad, porque tenemos una oposición
encabezada por el Partido Socialista y soterradamente con el Frente Amplio, dos
referentes de la oposición que se han encargado de hacer difíciles los primeros
meses del gobierno de Sebastián Piñera, porque le han negado la sal y el agua,
demostrando la mala fe y mala actitud que siempre han tenido como el caso del
PS así como el FA, generando acusaciones, interpelaciones, acusaciones constitucionales
a solo dos meses de instalación de este gobierno, algo nunca antes visto en el
proceso de instalación de un nuevo gobierno y que probablemente no se vuelva a
ver. Se quiere acusar a un ministro de Salud por el protocolo de aborto, pero
nadie acuso a la anterior administración
por dejar dos millones de personas en lista de espera, por ser el país que más creció las tasa de VIH, por haber dejado
sin presupuesto a la corporación de trasplante, por sacar personas de listas de
esperas para que el personal cobrara su bono de excelencia, lo que muestra su
clara intención de quienes promueven esta
acusación, desestabilizar la nueva administración. Porque acá tenemos dos
caminos, uno el gobierno se sacude de esta persecución encarnizada, encabezada por
Álvaro Elizalde en concomitancia con el FA (los futuros socios electorales), y
comienza a blindarse para desarrollar su plan de gobierno o se subyuga a un
desfiladero de autoridades a responder ante el congreso hasta que logren llevar
al presidente mismo para su destitución.
Tendremos que decidir como ciudadanía si nos
sumamos a la tarea de salir del subdesarrollo o nos sumimos en la crisis que están
nuestros vecinos, que como nos podemos dar cuenta no saben a dónde ir después de
enjuiciar a todos y por todo, creo que la mayoría obtenida en las últimas
elecciones presidenciales debe ser defendida en post de nuestros hijos y así
como nuestra vejez, hemos sido un país estable por casi 30 años, lo que ha
significado crecer, desarrollarnos así como crear esperanza, no merecemos vivir
en un caos permanente que nos quieren llevar.
Comentarios